Una ruta de senderismo extremo en Bulgaria: Eco sendero «Borov Kamak»

Senderismo extremo en Bulgaria.

Si eres aficionado a las rutas de senderismo «especiales» habrás oído hablar de alguna ruta de senderismo extremo que se encuentra en España como la de: Pasarelas sobre el río Mao, Pasarelas de Montfacó, Cahorros de Monachil, Canal de Urdón, etc… Se las llama extremas porque el sendero tiene tramos aéreos sobre puentes o pasarelas o tramos protegidos por una barandilla porque están al borde del abismo. Sin duda requieren no tener miedo a las alturas y poseer un espíritu aventurero mayor que el necesario para realizar las rutas de senderismo sencillas que son más habituales.

Eco sendero «Borov Kamak»

Eco sendero «Borov Kamak».

Aquí te presentamos una de las rutas extremas más desconocidas de Europa pero no menos emocionante que las mencionadas arriba, con la ventaja que precisamente por ser poco conocida aún no está masificada, no tendrás que pararte para dejar paso al que viene de frente ni esperar turno para pasar por sus pasarelas, como ocurre el algunas de las más frecuentadas y famosas.

Además la ruta de senderismo «Borov kamak» tiene la ventaja de que el paisaje permanece siempre verde y frondoso incluso en pleno Verano, porque se encuentra dentro de un Parque Natural y en un zona que mantiene la humedad durante todo el año. En Bulgaria las rutas de senderismo señalizadas se denominan «ekopateca» que se puede traducir como eco-sendero. Esta ekopateca tiene oficialmente el nombre de «Vrachanska ekopateka» aunque también se la conoce como la ruta «Borov Kamak» porque la ruta alcanza una cascada de agua del mismo nombre.

La ruta tiene su inicio en las afueras del pueblo de Zgorigrad, un pequeño pueblo cercano a la ciudad de Vratsa, capital de la región, a una hora y media al Norte de la ciudad de Sofía. Entra dentro de la categoría de rutas de senderismo extremo porque emplea escaleras de madera, pasarelas, barandillas para realizar el recorrido y salvar los pasos por encima del río Vartesthnitza y de barrancos, sin la ayuda de esos elementos sería imposible alcanzar la cascada simplemente caminando. Los puentes, pasarelas y barandillas que se pasan durante la ruta de senderismo son todos artesanales y construidos con troncos y ramas de madera natural, nada de listones uniformes y bien serrados, sino mas bien una amasijo de ramas y troncos que se han aprovechado tal cual los encontraron y unidos entre sí mediante clavos. Eso incrementa la sensación de aventura porque hay que confiar en que están bien clavados para que mantengan nuestro peso ya que a veces dan la sensación de inseguridad, pero es sólo una sensación, al fin y al cabo si han aguantado el paso de otras personas, por qué no el nuestro? Bromas aparte, todo el recorrido es seguro siempre que tengamos cierta experiencia y no seamos unos patosos porque lo que sí hay que saber es que no es un recorrido que pueda hacer «cualquiera».

En el inicio de la ruta se encuentra este cartel explicativo, luego se camina por un sendero en paralelo al río con cierta pendiente, este primer tramo parece anodino y no da una idea de la aventura que nos espera más adelante. Al cabo de unos minutos nos encontramos con el primer puente de madera sobre el cauce del río, seguimos las marcas del camino señalizadas sobre las piedras del suelo y vamos a encontrar otros puentes que nos van haciendo caminar de un lado a otro del río. Por fin se llega a la zona más extrema donde nos encontramos con una escalera de madera casi vertical y pasarelas que desafían al vacío fijadas no se sabe cómo a la roca vertical. Desde allí las vistas son espectaculares, incluída la vista de nuestros pies sobre los listones de la pasarela que dejan entrever en vacío bajo nuestros pies.

Intercalando tramos de escaleras y tramos a pie vamos ascendiendo por el valle que formó el río «Vartesthnitza» , se suceden pequeñas cascadas que forma el río, pozas y escenas idílicas que nos hacen parar a menudo para sacar fotos del entorno. En algunos tramos hay que subir piedras ayudándonos de las manos, no es una escalada propiamente dicha pero sí que requiere de habilidad y buena forma física, por todo ello se puede considerar una ruta de senderismo extremo. Depende de las paradas que hagamos pero al cabo de unas 2 horas de subida alcanzamos la cascada de «Borov Kamak», de la que evito poner foto aquí para no restar expectación a la subida, el que quiera verla debe llegar hasta arriba, jaja…Una vez arriba podemos volver a bajar o aprovechar para almorzar en una bella explanada que hay un poco más arriba de la cascada y que ofrece fantásticas vistas del entorno.

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